Es momento de decir adiós a los procesos deficientes
y dar el paso hacia la digitalización en el sector construcción
En 2018 publicaba una nota en la que hablaba acerca de cómo el sector de la construcción era uno de los menos digitalizados no solo en el Perú, sino en el mundo. Hoy, cinco años después, si bien han habido avances, se han creado más contech y se han modificado procesos, todavía estamos lejos de la madurez digital que tienen otros sectores como el retail o el inmobiliario.
Pese a que el retraso en la transformación digital del sector no ha hecho que este se desacelere, en términos de que se siguen construyendo nuevas viviendas, oficinas entre otros megaproyectos; lo que sí sucede es que los procesos podrían ser más rápidos, menos costosos y más eficientes si la mayoría de los actores del sector perdieran el miedo al cambio, dejaran atrás viejos procesos y le abrieran las puertas a la innovación y al uso de nuevas tecnologías, que han demostrado ser efectivas en grandes proyectos en países más avanzados que el nuestro.
Dejar atrás enfoques anticuados ayudará a superar los problemas del sector
Si echamos una mirada al pasado de la construcción (sin irnos tan atrás) veremos que está marcado por problemas de productividad y conflictos entre los diferentes actores; y si miramos el presente, tampoco nos encontramos con un escenario perfecto: todavía existe poca mano de obra calificada y una necesidad por reducir los costos. También observamos que muchos problemas de productividad siguen existiendo; y muchos de estos se deben a datos incorrectos o a procesos deficientes, los cuales afectan el presupuesto de las obras, ocasionan demoras e incluso retrabajos.
Pese a que los problemas de ayer, siguen estando presentes hoy en día son solucionables, siempre y cuando la industria se libere de enfoques anticuados y abra la mente a nuevas soluciones cuya eficiencia ha sido demostrada; en otros términos, se necesita que la industria tome un enfoque colectivo y centrado en el futuro para superar los desafíos actuales del sector.
Pero, ¿cómo superar los desafíos actuales?
La oportunidad más interesante se encuentra por el lado de las adquisiciones. Esto no significa seguir cometiendo el error que se viene haciendo desde hace algunas décadas, es decir, no quiere decir que debamos seguir reduciendo el precio de las ofertas; sino fomentar mejoras en el negocio en sí. En otros términos, en vez de seguir el enfoque de “menor costo”, lo que debemos hacer es desarrollar asociaciones a largo plazo que nos permitan tanto adquirir recursos como mano de obra eficiente y asequible. Al proporcionar estabilidad a los actores más pequeños, lo que ganamos es que puedan invertir en mejorar sus procesos, aprender habilidades esenciales, desarrollar soluciones innovadoras y eliminar las barreras de inversión en tecnologías.
Como resultado de invertir en tecnologías, así como integrarlas en sus procesos desde el inicio, las compañías podrán confiar más en la información de licitación además de agilizar las revisiones de diseño.
En cuanto a cómo superar la escasez de mano de obra calificada, la solución es desarrollar un estándar de cultura que permita mejorar la productividad y ayude a corregir los problemas que hacen que el sector sea menos atractivo para los nuevos participantes. Por el contrario, lo que se debe buscar es captar la atención de nuevos líderes, para lo cual hay que demostrar que existe una línea de carrera para ellos y un entorno donde puedan aprovechar sus habilidades sin limitarlos por pensamientos tradicionalistas. Solo de esta forma podemos ser capaces de atraer talento con esas habilidades digitales que tanto necesita el sector, ya sea para su uso en proyectos, o para su desarrollo.
La transformación digital del sector es una realidad que no espera al mañana. Los cambios deben darse hoy para que las tecnologías del mañana sean más fáciles de adaptar y asimilar. La implementación temprana ayudará a que los problemas de productividad se superen; asimismo, permitirá que los actores del sector tengan un futuro más seguro y próspero.